Angel Gayúbar. Graus.
Más de cincuenta personas participaron el pasado 13 de noviembre en una excursión por el valle del Isábena organizada por el Centro Excursionista de la Ribagorza, CER. Tras la salida de los participantes en autobús desde la grausina Glorieta de Joaquín Costa, la caminata se inició en Las Vilas del Turbón y, tras atravesar en una jornada de excelente climatología los extensos cajigales que flanquean en esa zona el valle del Isábena, terminó junto al monumental monasterio de Obarra, una de las joyas románicas del Alto Aragón.
Para llegar hasta allí, los expedicionarios pasaron por los senderos –casi todos convertidos ahora en PRs- que comunican las localidades de Brallans, San Aventín, Visalibons y Raluy, disfrutaron de los imponentes paisajes que se dominan dese varios de los miradores del recorrido e incluso encontraron alguna que otra seta aunque no muchas porque, siendo como es el terreno es propicio, no está siendo éste un buen año para la micología. Y tampoco encontraron rastro de la presencia de la osa que ha protagonizado en las últimas semanas varios ataques a distintos rebaños que apacientan en la zona. Algo que habría sido un nuevo aliciente para esta excursión que se prolongó por espacio de casi seis horas a paso tranquilo y de la disfrutaron enormemente todos los participantes, desde el benjamín, con siete años, al grupo de los más veteranos que ya pasan de los setenta.
Tras la marcha, los excursionistas disfrutaron de una suculenta comida en un restaurante de La Puebla de Roda.
Publicado en Heraldo de Huesca.